El boom del sérum: para qué sirve, qué es y tipos

Cuando vas al super, a una tienda de belleza, o en los inumerables videos de la web, ves un producto constante: el sérum. Y aunque desde hace unos años se ha vuelto más popular, es ahora cuando está más disponible y accesible para todo tipo de presupuestos y necesidades. Cualquier rutina de skincare debería tenerlos y el boom del sérum lo hace posible. Te contamos para qué sirve, qué es, los precios y tipos de sérums.

Pero con tantas opciones para probar llega a ser confuso cuál escoger. Ya que depende tanto de tu edad, tipo de piel, necesidad de esta, qué beneficios buscas y hasta qué activo usar. Por ello, se llega a cometer muchos errores para garantizar su máxima efectividad.

¿Qué es y para que sirve un sérum?

El sérum es un producto para el cuidado de la piel altamente concentrado con principios activos, formulado para abordar problemas específicos de esta y proporcionar beneficios adicionales más allá de lo que ofrecen las cremas hidratantes. Además, su textura ligera y rápida absorción lo hacen ideal para penetrar profundamente y entregar ingredientes activos de manera efectiva.

Los sueros están diseñados para tratar y prevenir una amplia gama de preocupaciones de la piel, como arrugas, manchas oscuras, sequedad, opacidad y más. También, potencian los beneficios de otros tratamientos que se aplican después.

¿Cómo y cuándo utilizar los sérums?

El momento y la forma en que se aplica el sérum pueden afectar su eficacia y los resultados que ofrece, aunque ojo, hay algunos que pueden variar ligeramente. Aquí tienes algunas pautas sobre cómo y cuándo usar los sérums en tu rutina de cuidado de la piel:

1. Limpieza

Antes de aplicar cualquier sérum, es importante comenzar con una piel limpia y tonificada. Utiliza un limpiador suave y un tónico para eliminar cualquier residuo de suciedad, maquillaje y bacterias.

2. Aplicación del sérum

Después de limpiar y tonificar, aplica el sérum sobre la piel ligeramente húmeda para ayudar a que se absorba mejor. Siempre ten cuidado de no poner el suero directamente de la pipeta, sino poner unas gotas en tus manos y luego llevarlas al rostro. Solo se necesita una pequeña cantidad de producto, ya que los sérums suelen ser altamente concentrados. Masajea suavemente el producto en tu rostro con movimientos ascendentes y circulares, evitando el área delicada alrededor de los ojos.

3. Orden de aplicación

Si estás utilizando múltiples productos para tu rutina de skincare, es importante aplicar el sérum antes de cualquier crema hidratante o protector solar. Esto permite que los ingredientes activos del sérum penetren en la piel de manera efectiva y maximicen sus beneficios. Es vital aclarar que lo pueden usar tanto mujeres como hombres.

4. Frecuencia de uso

La constancia de su uso puede variar según el tipo de producto y las necesidades individuales de la piel. Algunos sérums están diseñados para ser utilizados una vez al día, mientras que otros pueden ser adecuados dos veces al día, por la mañana y por la noche. Lee las instrucciones del producto y ajusta la frecuencia de uso según sea necesario.

5. Combínalo

Los sérums son altamente versátiles y se pueden intercalar con otros productos según tus necesidades específicas. Por ejemplo, puedes utilizar un sérum hidratante por la mañana y un sérum antienvejecimiento por la noche para obtener beneficios adicionales.

6. Protector solar

Si estás aplicando un sérum por la mañana, asegúrate de seguirlo con un protector solar de amplio espectro para proteger tu piel de los daños causados por los rayos UV. De acuerdo con los especialistas, el mejor consejo para prevenir el envejecimiento es usar y reaplicar cada cuatro horas el protector solar.

Tipos de sérum

En el boom del sérum, hay miles y cada vez más específicos, sin embargo, los más comunes son para cubrir las necesidades de hidratación y signos de la edad. Pero, no son los únicos.

Hidratante:

Formulado para proporcionar una hidratación intensa y duradera, ideal para pieles secas o deshidratadas. Suele contener ingredientes como ácido hialurónico, glicerina o ceramidas, los cuales ayudan a retener la humedad en la piel, para así mantenerla suave y flexible.

Antienvejecimiento:

Dirigido a reducir la apariencia de arrugas, líneas finas y manchas oscuras, y a promover una piel más firme y juvenil. De hecho, los sérum antiedad suelen tener retinol, péptidos, ácido hialurónico y cólageno, así que, estimulan la producción del último, y de este modo reduce los signos de la edad.

Iluminador:

Diseñado para aclarar la piel opaca, mejorar el tono desigual causado por manches oscuras o decoloración, también proporciona brillo y luminosidad. Para tratar esta necesidad los sueros contienen niacinamida, vitamina C, ácido kójico y extracto de regaliz, justamente para igual el tono y aclarar las manchas.

Calmante:

Es diseñado para calmar y aliviar la piel sensible, irritada o propensa a enrojecimientos, incluso para quienes sufren de rosacea. Este tipo de sérum suele contener ingredientes suaves que ayudan a reducir la inflamación. Algunos de los ingredientes comunes en los sérums calmantes incluyen aloe vera, extracto de manzanilla, alantoina y centella asiática. Un cutis reactivo agradecerá y fortalecerá la barrera cutánea.

Exfoliante:

Elimina las células muertas y promueve la renovación celular, revelando una piel más suave, luminosa y uniforme. Estos suelen contener ingredientes exfoliantes suaves que ayudan a destapar los poros, mejorar la textura y tratar las manchas de acné. Algunos ingredientes que se usan son ácido glicólico (AHA), ácido salicílico (BHA), enzimas de frutas como la papaya, la piña o la calabaza, entre otros, y extracto de bambú.

Antioxidante:

Protege a la piel des estrés oxidativo y combate los efectos dañinos generados por los radicales libres, los cuales son moléculas inestables que pueden dañar las células y contribuyen al envejecimiento prematuro, la pigmentación irregular y otros problemas cutáneos. Asimismo contienen vitamina C, vitamina E, ácido ferúlico, extractos botánicos como té verde y coenzima Q10. Por lo tanto, sus ingredientes ayudan a neutralizar los radicales libres y fortalecen las defensas de la piel.

¿Cómo escoger el sérum ideal?

Agregarlo a tu rutina de skincare es una gran idea, pero ¿cómo elegir entre tantas opciones? Lo primero es asesorarte con un experto, ya sea un dermatólogo, farmacéutico o dermocosmético. Sin embargo, lo más importante es escuchar a tu piel, identificar qué necesita para así poder consentirla y tener la mejor cara posible, literalmente.

Como conclusión, el sérum perfecto será aquel que cubra todas las necesidades de nuestra piel, sin perder de vista la coherencia. Es decir, no usar solo un hidratante cuando tienes 40 años, porque las necesidades son mayores o no utilizar uno antienvejecimiento si tienes 20 años, simplemente aún no es necesario. Por último, investiga hasta que estés seguro de cuál es el ideal para ti.

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Mariel Otero del Río Creyente del amor verdadero y la magia de encontrarlo. Cursi y geek de clóset. Amante del cine, las series y las sagas. Siempre digo que al cambiar tu cabello, cambiará tu vida.