Qué es el gaslighting y por qué es tan peligroso este abuso
¿Has sufrido este abuso? Pon atención y si te identificas con algo, es hora de salir corriendo.
El gaslighting es una forma de abuso emocional y no está justificado en ninguna circunstancia. Debes priorizar tu bienestar emocional y no dudes en alejarte de relaciones o entornos tóxicos en los que te encuentres expuesto/a a este tipo de manipulación. Hace que la víctima dude de su propia percepción y realidad y confianza en sí misma, facilitando el abuso por parte del gaslighter. Es importante reconocer estas tácticas y buscar ayuda si te encuentras en esta situación, no importa si es una relación de pareja, familia, amigos, trabajo y escuela.
¿Qué es el gaslighting y cómo evitarlo?
El gaslighting es una forma de manipulación psicológica en la que una persona intenta hacer que otra persona cuestione su propia percepción, memoria o cordura. El término proviene de la obra de teatro y película “Gas Light” (Luces de gas) en la que un marido manipulador intenta hacer que su esposa crea que está loca al hacerle creer que cosas reales no están sucediendo o que está exagerando situaciones. Puede ocurrir en diversas relaciones, incluyendo relaciones personales, laborales o políticas, y puede tener efectos graves en la salud mental y emocional de la persona que lo experimenta.
Evitarlo puede ser un desafío, pero hay varias estrategias que puedes utilizar para protegerte y manejar mejor estas situaciones:
- Confía en tus propias percepciones: Mantén confianza en tus propias experiencias y percepciones. No permitas que otros te hagan dudar de lo que has vivido o presenciado.
- Establece límites saludables: Establece límites claros sobre lo que consideras aceptable en tus relaciones. Si alguien intenta manipularte o hacerte sentir confundido/a, comunica tus límites de manera firme y directa.
- Busca apoyo: Habla con personas de confianza, como amigos cercanos, familiares o un terapeuta, sobre lo que estás experimentando. El apoyo emocional y la validación externa pueden ser fundamentales para mantener tu perspectiva.
- Educa sobre el gaslighting: Aprende sobre el gaslighting y sus tácticas para reconocerlas cuando se presenten. Cuanto más comprendas esta forma de manipulación, más preparado/a estarás para identificarla y contrarrestarla.
- Mantén registros: Si crees que estás siendo víctima, lleva un registro de los eventos, conversaciones o situaciones que te hacen dudar de ti mismo/a. Esto puede ayudarte a recordar lo que realmente ocurrió y a validar tus propias experiencias.
- Busca ayuda profesional: Si te resulta difícil lidiar con este fenómeno por tu cuenta, considera buscar ayuda de un terapeuta o consejero que pueda proporcionarte herramientas adicionales para manejar la situación.
- Confía en tu intuición: Si algo no parece correcto o te hace sentir incómodo/a, confía en tu instinto. No ignores tus sentimientos o intuiciones, ya que pueden ser señales importantes de que algo está mal. ¡No olvides mejorar tu inteligencia emocional!
Ejemplos del gaslighting
- Negación de la realidad: Una persona te dice que algo que claramente ocurrió, nunca sucedió. Por ejemplo, si te confrontan sobre un comentario despectivo que hicieron, podrían negar haberlo dicho, incluso si estuviste presente cuando lo dijeron.
- Minimización de tus sentimientos: Cuando expreses tus emociones o preocupaciones legítimas, te dirán que estás exagerando o siendo demasiado sensible. Por ejemplo, si te sientes herido/a por un comentario hiriente, podrían decirte que estás siendo demasiado dramático/a.
- Inversión de roles: El gaslighter puede invertir las acusaciones y culparte a ti por su propio comportamiento. Por ejemplo, si les confrontas sobre algo que hicieron mal, podrían acusarte de ser tú quien está malinterpretando la situación.
- Cuestionamiento de tu cordura: Te hacen dudar de tu propia memoria, percepción o cordura. Por ejemplo, podrían decirte que estás imaginando cosas o que estás loco/a por creer en algo que realmente ocurrió.
- Desacreditación de tus opiniones: Cuando intentas expresar tus opiniones o puntos de vista, te hacen sentir que no tienes derecho a tener esas opiniones o que son irrelevantes. Por ejemplo, podrían decirte que tus ideas son estúpidas o sin sentido.
- Manipulación emocional: Utilizan tus propias emociones contra ti para controlarte. Por ejemplo, podrían decirte que te aman mucho y que están preocupados por ti, pero que tus preocupaciones son infundadas y que te están diciendo la verdad.
¿Qué es el gaslighting en el trabajo?
El gaslighting en el trabajo es una forma de manipulación psicológica que ocurre en el entorno laboral, donde un individuo intenta hacer que otro cuestione su propia percepción, habilidades o competencia profesional. Esta forma de manipulación puede provenir de colegas, superiores jerárquicos o incluso subordinados, y puede tener graves consecuencias en el bienestar emocional y el desempeño laboral de la persona afectada. Estas pueden ser: negación de logros, cuestionamiento de competencia, manipulación de la realidad, desacreditación de ideas o sugerencias y aislamiento.
15 Frases más usadas por manipuladores que hacen gaslighting
- “¡Nunca dije eso! Estás imaginando cosas.”
- “Siempre exageras las cosas. No fue para tanto.”
- “Estás loco/a si crees que eso realmente sucedió.”
- “No puedes confiar en tu memoria, estás recordando mal.”
- “Estás siendo demasiado sensible.”
- “Eso es solo tu interpretación, no la realidad.”
- “Siempre estás buscando problemas donde no los hay.”
- “Te estás volviendo paranoico/a.”
- “Estás siendo irracional.”
- “Nunca te dije eso, estás inventando cosas.”
- “Te estás haciendo daño a ti mismo/a al pensar así.”
- “No tienes idea de lo que estás hablando.”
- “¿Por qué siempre tienes que arruinarlo todo?”
- “Deberías calmarte y dejar de hacer una montaña de un grano de arena.”
- “Te estás volviendo loco/a por nada.”
¿Cómo responder al gaslighting?
Tienes que ser demasiado paciente y controlar tus emociones para poder responder ante este maltrato, aquí hay algunos tips que no puedes pasar por alto y como responder en caso de ser victima. ¡Toma nota!
- Confía en ti mismo/a: Mantén confianza en tus percepciones y experiencias. Recuerda que tienes derecho a tus propias emociones y opiniones, independientemente de lo que otros intenten hacerte creer.
- Con pruebas en mano: Siempre que sea posible, lleva un registro de los eventos, conversaciones o situaciones que te hagan dudar de ti mismo/a. Tener pruebas concretas puede ayudarte a validar tus experiencias y contrarrestar los intentos de manipulación.
- Usa la técnica del espejo: Refleja las tácticas de gaslighting de la otra persona devolviéndoselas de manera no confrontativa. Por ejemplo, podrías decir: “Parece que estás tratando de hacerme dudar de mis propias experiencias, ¿por qué haces eso?”.
- Busca apoyo: Habla con personas cercanas sobre lo que estás experimentando. El apoyo emocional y la validación externa pueden ser fundamentales para mantenerte firme.
- No te involucres en discusiones interminables: Reconoce cuándo la otra persona está tratando de llevarte a una discusión sin fin y elige no participar. Mantén la calma y retira tu atención de la manipulación.
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